Para todos los que sueñan y le dan importancia a los sueños. Y que a lo largo de su vida, descubren que lo que sueñan tiene algo relacionado con su vida.
Somos caminantes en un viaje donde a veces las respuestas de nuestra vida estan en los sueños.

viernes, 17 de junio de 2011

LA VIDA ES UN SUEÑO (XVII)



Otro sueño mas en esta vida;







Estaba viviendo en un ático con mi padre, teníamos unas vistas excepcionales donde se veía todo el planeta, era de noche se veía todo iluminado, el clima era de verano, estaba viendo la televisión y anunciaban una revelación mundial. En unos momentos apareció la prima de mi padre con su hija pequeña y su perro Goku por la terraza, entraron dentro, el perro se quedo con los demás animales que ya estaban allí Jaky, Nuca, Puca y Roni, ellos miraban hacia arriba aullando estilo aullido de lobo. La prima de mi padre vino para decirnos que se encontraba mal por todo lo ocurrido y que había perdido todo. Me explico que si le podía dejar dinero para salir del país, al mismo instante me llama mi madre y me dice que vayamos con cuidado que cojeáramos todo y no dejáramos nada a nadie. Total que fui a la prima de mi padre y le di el dinero que tenia, porque yo a ellos los aprecio mucho. Luego les di un abrazo a las dos y al momento me vi con mi padre y con mas gente de mi familia en la calle corriendo y esquivando grietas del pavimento que se iban abriendo por los misiles que nos lanzaban desde algún lugar del planeta. Las explosiones eran inmensas cada vez era peor, los ruidos de los misiles eran superpotentes, empezó a subir la marea como si hubiese pasado un tsunami, cada vez subía mas deprisa. Saque fuerzas de donde podía para ir trepando y subiendo escalones y puentes en los que se derrumbaban cada vez mas, la gente gritaba aterrorizada me pare en un edificio donde estaba una televisión y decían que estos ataques venían de Turquía a consecuencia que los islámicos habían atacado España, pero no llega todo aquí porque también salia Colombia que estaba cayéndose todo y derrumbando se todo medellín quedaba como un barrizal. Al final me subí en un autocar donde decía que nos llevaban a un alojamiento, desde la ventana veía todo el desastre que se había formado, era horrible todo lleno de llamas y fuego edificios caídos y todo inundado.







Cuando me desperté hacia un sol esplendo que se asomaba por la ventana en un día de verano espectacular

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